Literatura
irresponsable.
A
los cómplices
Fuga es una auto crítica, una vieja protesta tratada como
arte. Un necesario error.
Una gota única conocida históricamente como una excepción.
Un necesario comienzo de este escritor que busca llenar las estanterías de una
prolongada traición. Un maldecir necesario, un diccionario acotado y
desfigurado de este pobre de pasado reventado.
Fuga jamás será leída por su objetivo. Fuga es un libro
tardío. Fuga es una burla de poco conocimiento y de rabia de razón de un solo
pensamiento. Fuga lleva prisa, ignorancia y desdicha. Fuga es el comienzo; un
primer paso fuera del miedo; es el bastón de un ciego.
Fuga trae como ya nota rimas que son chispas; que a primera
vista son llantos fatigados, de mucho pasado. Son la puñalada de un costado.
Trae entonces significado envuelto de pasos viciados, viejos
llantos de alcoholizados, vicios desfigurados, presentes malgastados. Fuga es
mi rechazo a esta vergüenza. Mis alharacas vírgenes de frutos. Mi mal gusto. Mi
susto. Fuga es mi renuncio, mis disculpas por tanto disgusto. Mi abrazo a los
que me rodearon.
FUGA
Fuga
El alma se vio sin cuerpo,
la pena anda en el viento:
virgen la rabia en trapos
de sentimientos,
el desconsuelo en bolsas
de té,
políticos en vitrinas,
pupilas dominadas en
conciencias entrenadas.
El alma se vio sin cuerpo,
la pena anda en el viento:
la lucha en el museo, la
idea en la locura,
el hambre tiene gracia en
cuadros,
la memoria es mística.
Muchas voces en un solo
canal, muchos canales para una sola voz.
Todos giran sobre sí mismos
en distintas direcciones, según el roce el des-plaza-miento.
Los tiempos de siempre con
distintos cuentos,
un recorrido quieto.
Suerte de palabras sin
límite de uso,
los muertos…
el alma pierde su cuerpo,
la pena hace justicia en el viento.
Desfase
Tres segundos antes de la
hazaña
A dos segundos de tus
pestañas
Seis segundos después del
jaque mate.
Segundos después de la
despedida
el
papel y el lápiz
Droga
La juventud tiene los
argumentos suficientes para drogarse.
Así se le ve obligada con
el tiempo a mantener su orgullo.
Crece la incapacidad de
conseguir que el cuerpo genere por si mismo las toxinas que se compran en
bolsitas.
La
pérdida de tiempo es alentada desde el alma.
Simbiosis
Preciso la palabra como
preciso del error
del resto una razón y la
democracia.
Ironías por kilo, trampas
a granel
Astucia llamo al agua bendita.
Bendita llamó Satán al hombre del pincel.
Confusión alego al juego
del poder .
Celibato
el miedo y cárcel un querer.
Culpa
Gran parte de mis fuerzas
ocultaron lejos mi corazón;
lejos, donde mi ingenuidad no pueda hallarlo,
pero con ingenuidad fui a esconderlo, sin su
ayuda no puedo ir por él.
Modernidad
Con escritos intento
persuadir este cuento,
evitar el frío de la
baldosa.
Fija la mirada para ver el
intento donde reposa
toda la desdicha que
recoge el cemento.
Marcha cotidiana con
horario,
comida por traer.
Hijos que mantener,
suero a la vena a diario.
Niñas creciendo
desprotegidas.
Corruptos padres,
cómplices madres.
Sanos gestos que olvidas.
Desfase de trabajo bien
vestido.
El niño solo en casa,
la pregunta que se aplaza.
Los golpes sin sentido.
Escrito de presente
contenido.
Esclavos del poder,
escuche: voluntad es
querer.
A la suerte que corra el
desprotegido.
Relatividad
El tic-tac de un reloj. Yo
no tengo reloj. Yo no soy de aquí.
El ají si, de ahí soy.
El ají me duele la guata.
Tanto copete y tanto andar
a pata.
Revueltas que dejan y
revueltas que quitan.
Amigos y amigas, el
tic-tac de un reloj. Yo no tengo reloj. Yo no soy de aquí.
Tic-tac,
tic-tac…
Lo caro
lo caro que esta el
negocio.
lo caro del satisfecho de
mármol
lo caro de la sed del
fiambre
lo caro del desentendimiento
lo caro de ser cómplice
lo caro del carabinero
lo caro del rasta coquero
lo caro de la pena y el
alcohol
lo caro del traficante
lo caro que sale el
enfermo
lo caro de los muertos en el
olvido
lo caro del sueldo
lo caro del convencido
lo caro de estos tiempos y
la
cara de estos niños.
Resfrío
La
mosca baila la música clásica y afuera la primavera es insaciable.
Vanidad
Esta civilización la pagan
los pobres, los pobres en sus sillones de cuerina frente al televisor, los
jóvenes orgullosos de la fe heredada por sus padres, los cada quien con su
cuento. La pagan los maestros y los estudiantes. La pago yo con cada palabra
que escribo y con cada gesto que te doy. Esta sociedad sabe de abusos y
remedios.
Esta
sociedad te vende vanidad y se paga
caro.
Soledad
El
pájaro de pecho rojo que tanto aprecie nunca supo de mí, como la mayoría de las
cosas que aprecio.
Los imprescindibles
Imprescindibles son los
auténticos
Los burlados del presente
Los que construyen
historias para su muerte
Los cobardes aglomerados,
siempre extasiados
repiten como broma su
límite trazado.
El valiente no teme a la
soledad
Pues sabe de cuentos
viejos
en donde prospera la bondad
La soledad es la
oportunidad
de
crear lo que los sordos no supieron escuchar.
Voces
La ignorancia tiene prisa,
La vida no tiene refugio
La mentira marca la
sonrisa
Las olas no descansan
La luna esta en guardia
Los sentimientos no se
tranzan
Este juego de arrogancia
Decidir a tiempo.
Que el arrepentimiento es
zumbido,
borrachera y ladridos
La familia y la métrica
Las fuerzas armadas
La cobardía tétrica
Las luchas rimadas.
El fin de una era
de educación esclavizada.
En
sueños pinto a mi manera
a la memoria tatuada.
Remedio
Caricia sincera cada 4
horas para males graves.
Una antes de cada comida.
Caricias por la noche,
nada de reposo
Caricias desinteresadas.
Terapia de caricias
Auto-caricias, si no se
tuviese quien lo acaricie
Caricias para este mundo
Caricias
para siempre.
Kaskivano
Nada de sabiduría en lo
que cuento, ya es farándula y periodismo. Solo lo escribo por seguir llenando
las estanterías de lo postergado. De seguro ya fue escrito hace cien años o
solo un momento atrás, pero sigue pasando; entonces nunca está de más.
Por estar cerca de la
gente que admiro: la gente que lucha.
Lejos
de los parámetros del miedo, cerca de los ríos de la sangre.
Periódico
¿Viste el ego? Bebo sociedad, consumo lo cierto, disfrazo la
pena, marco la sonrisa.
Teloneros, archivadores,
prensa escrita, contratistas, obreros; de mejillones a Arica.
Para ronquidos, bostezos, guiños y razón de espejo. Como un as bajo la manga
la palabra desmembrada; peor que el ácido
y el dinero.
A
lo que viaja, no en las cloacas; si no a su voluntad.
Enfoque
El poder de la mirada
Frío cálculo de
intenciones
La presencia asustada
Pensamientos y
alucinaciones
Concentración de pupilas
sin pestañas
Idea única entre cejas
Miradas de patrañas
Vende caro y compra barato
Cree lo que quieras
Recuerda la jugada del
enroque,
no
me vengas con un solo enfoque.
Desenfoque
Creo pensar algo en
fantasmal idea
Un renuncio a la real
tarea
Traes a mi ninguna idea
Sentada la memoria espera
Condición de entrelineas
Abismo propio y ondulante
Fatiga del pensante
Vuelve
a mi dice la voz de una mujer
Vuelo nupcial
La
idea que escribo es la que clavo. Así cae muerta. Nada tiene que ver con lo
bueno o lo malo. Es la naturaleza de la idea.
Pesadilla
Se presenta en pesadilla,
suena la puerta de mi sueño en la playa.
-abro-. Con voz gruñona dice: “Soy el cáncer, nacido
y criado aquí, amigo de pocos y maldición de muchos. ¿Quién eres tú? – cierro
inmediatamente con un abrir de ojos-.
Vómito
Embargado el pensamiento
La deuda con el nacimiento
El costo del conocimiento
La mentira del orgullo
El testimonio de la
historia
La poesía al enamoramiento
El sexo en vuelto
La duda y el
sobrecogimiento
El arte y la ciencia
Las armas y el
convencimiento
La lucha sin perdón
Cualquier cosa es religión
El corazón es un músculo
La rebeldía y el patrón
Cada cierto tiempo un vómito
es necesario,
sin
filtros ni clavos de olor.
Todo vicio
El vicio frunce el ceño y en su mejor momento
es razón, es de gracia dar connotación
mística a un vicio,
como no es de mi gusto
mucha gracia…
…entonces no muchas gracias.
Propuesta
¿Solo la política puede
derrotar a la política?
David derroto a Goliat
Los griegos a los troyanos
los católicos a los
humanos
Salas a Zamorano
Sabina a Serrat
Nicanor a Neruda
la gorda a la peluda
el miedo a la paz
la ficción a la realidad
la pistola a la cuchilla
el ninja al vaquero
el profesor al alumno
el negocio a la razón
el oído a la vista
el escrito a la poesía
la sobrina a la tía
el huevo a la cascara
la rima a la sabiduría
la noche al día
el wat sap al feisbuk
el calor al frio
tus besos a los míos
el silbido a la bocina
el ácido al hígado
el thc a la neurona
la polola a la consola
la realidad a la broma…
El amor, pasa soplao y
silva de noche y de día
es profesor y alumno
consola y polola
es oído y vista
sabe de pistola y de
cuchillas
sabe de católicos,
troyanos
de David y de Goliat.
¡En cambio estos políticos
shushesumare!
La suerte es suerte desde
que la vida es vida.
El pensamiento es la virtud
de controlar la suerte de los propios movimientos, los acontecimientos
inesperados en la decisión son la burla del poco conocimiento.
Bienvenido
es el intento de control sobre el pensamiento.
Alma
Llora de vez en cuando
para lavar la maldad
Procura arte para contar
su verdad
Verdad dice sin ninguna
responsabilidad
Fiel argumento mágico,
escasa voluntad.
Cuentos de hadas para
levitar
Guarda silencio eterno
Tiene su propio altar
Camina descalza por el
infierno
Bella compañera del
luchador
De aquel que busca y no
encuentra explicación
De el que le crecen flores
en su corazón
Del que pinta por darle
color al amor.
Eres así arma de doble
filo
Colores para la vida
Y
disfraz para el cobarde.
Profeso un credo que
mañana desmentiré.
Cada mañana distintas
lagañas.
Cada beso, cada paso, cada
cuanto.
Retorcido el escrito, ni
fe, ni te cito.
Créame como yo me creo,
nada.
Son
intentos de auto inferirme puñaladas.
Arrepentimiento
Mis disculpas.
Bien venido día.
Agradezco de antemano mi
suerte.
Bravo aporte hace la mujer
con su vientre
Y valiente el hombre
recaudador
Disposición tenga. Por su
gratitud: la vida
Compañero sano, me
arrastro a usted como gusano, como reptil, sin vientre ni raíz.
Siento confundir vivir con
maldecir,
arranca
mis ojos y déjame vivir sin pulir color alguno.
Vecinos periódicos
Bebe sociedad, viste el ego, fuma lo cierto
lee sabiduría, entiende de amor
confunde la vida, atiende el negocio
ignora la memoria y los sentidos
baila para distraer lo sucedido
razona y pide perdón
si desespera oye al buen dios.
Gol de chile se oye desde las casas al paso de mi
camino.
Mientras en la multi-cancha abandonada del lugar desde
una sombra difusa se oye la voz de una mujer: “te molesto con una monea,
disculpa”.
Walking dead
Noches
pálidas de hablar y hablar esperando escuchar algo que este a tiempo con mi
velocidad, rodeado de zombis pálidos descascarándose frente a mí, al
guitarrista se le caen los dedos, el cantante se traga sus dientes, la
chiquilla en la cajita musical, el baterista parece feliz.
Las
visitas son las horas que ven esperar algo que sabía que iba a pasar.
Desconcierto entonces, en noches pálidas.
A tiempo
Danza de teorías obreras es orgullo de muchos.
Trabajando la muerte esperas sin preguntarte mucho.
Con la excusa de la humildad ignoras lo que llamo
presente.
Segundo a segundo el conocimiento florece.
La ciencia sin tribuna mientras el hambre crece.
La pregunta se refleja en la luna de aquel que soledad
padece.
Nada
de vende ni compra; solo las bondades que el conocimiento ofrece.
Aula
Treinta niños y un
profesor
Sin cuerdas cae el
ascensor
Legislación para la
necesidad
Pizarrón para la verdad
Regimiento de ángeles productores
A conciencia trabajadores
Con la excusa de mil
amores
Principio de males
subvencionados
particulares diferenciados
cada
lote un pasar frustrado
Redundancia
La palabra sale estrangulada por el nudo de la corbata
El mundo es su escenario: como el laboratorio y la
rata
Todo lo que tiene es caridad barata, secuaces le
sobran con el cuento de la plata.
La discusión son sus intereses, la distracción, el
vocabulario, la consecuencia.
La pasión al rojo le crece, la escolta. Caridad. Lo
privado es la herencia.
Ciclo
de palabras para esta vergüenza.
rezo
Celosa duda ven sube este árbol conmigo
No me faltes rabia santa.
Humano pensamiento,
hágase tu voluntad,
dame una razón cada día.
Publica mis ofensas.
Ahora y en la hora de vuestra muerte,
amen.
Bienvenuti
La paciencia es humilde,
el presente un placer,
desde que viene y a donde
va.
La intención es un
elástico,
la energía no trae conciencia ni sabiduría.
El enredo del miedo,
cada humano y un planeta.
Así
esta puesta la mesa puedes apoyar tus codos
Caminata
Pobre mi locura camina por
la niebla con el estomago vacío, busca conversar con las almas en pena.
Bajo
la luz amarilla del poste las polillas ya son como borrachos de cantina, los
grillos visten túnica y calzan cruz y no pienso rebajarme a las hormigas que
suben por mi pie. Calzo cuadrille, calcetines rojos, cargo en mi mochila:
chaleco, cuaderno y grafito; camino por
la niebla buscando hablar con las almas en pena, suena cada vez más lejos la
ciudad, aquí voy.
abc
Un vaso en el fondo del
mar.
Un libro en la biblioteca.
Una plegaria en la ciudad.
Un te quiero dentro de la
soledad.
Una pregunta en la
pubertad.
Una razón entre la
sociedad.
Una escalera a la traición.
Un bajativo a la culpa.
Con la madera de mis
muebles construyo mi propia tumba.
Suicida
Pienso
por entretenerme que el presente esta en
el vientre el pasado ahora y el futuro es mi muerte.
Suspiro
Crisis llamo a querer
volver al encierro
Olvido a renegar la
memoria
Alharaca a la moda
Respiro es el viaje
Mochila de ladrillos el
espíritu santo
Ver de dinero o verde
árbol
Armónica en noche de
faroles
Vino y cenicero
Suspiro
en fría noche de tiritones.
De caza
Entra
y dice con voz fuerte: ¡que nadie se mueva!, somos humanos y venimos a cazar
políticos, que los humanos permanezcan sentados y los políticos, ¡de pie!
Suerte de universo es la
mía.
Vago caminando cogiendo
historias.
A cada momento escribo en
mi memoria,
el paso de la noche al
día.
El militar fue niño igual que el músico
El amor no distingue valores
La responsabilidad no es del músico ni del militar
Si no de un ambicioso intento
La responsabilidad tiene pañales
La acción es el ejemplo
Las palabras son puñales
El escrito, mi vago intento
Un samurái en la sinagoga (toma uno-el samurái)
¡Acción!:
“Cesares de los sedados,
conocerán el filo de mis intenciones”…
…¡corte!
V e n t a n
a
Ventilar el cuarto del
amor es acción diaria. Solo así no se disipa el amor.
La razón
La niña conoció la razón y
fue rauda a contar a su madre. Parecía abundar la saliva en su boca y
gesticulando cada pensamiento antes de la palabra, con sus ojos bien abiertos
dice:” ¡mamá, no, tú teni que escucharme a mi igual! (señalando con el dedo a
su posición y levantando un pie que cae como patada al suelo), ¡porque yo se lo
qui ti digo!”;- interrumpe su madre con tono grave y fuerte- “ ¡a ver fundidita!,
mírenla”--Entonces acallo la razón--.
Al tiempo, crecida la
niña; hecha mujer, piensa en su madre con nostalgia y cariño y cuenta a su hija
sobre la razón.
entonces el hombre produce y es asalariado
con su salario debe comprar lo que el mismo produjo
con su salario debe pagar
lo que su vecino produce
con su salario debe pagar su salud
con
su salario debe alimentar y educar a sus hijos
todas cuestiones producidas por sus pares
y comercializadas por los mismos
impuestos, deuda,
no alcanza
Torpe
juego a plena luz del día.
Entre líneas
Una buena idea viene de la mano de una mala mentira.
Un buen sentimiento de la
mano de la humildad.
Una traición de un cobarde
incentivo.
Una tristeza de una buena
mujer
Un amigo de una soledad
La rabia del desconsuelo
La dulce melancolía del amargo
vino.
Lo oculto de la mano de un
libro y
un final de algún principio.
Grietas
Tus secretos entre mis
voces.
La participación con su
credencial,
la moda singular.
El temblor trae a tierra
por sus grietas mitos enterrados; el libro es un árbol del pasado.
La canción es amante
secreta.
La idea es inquieta.
El virus se propaga.
Las voces no se callan,
grietas.
Desde mi cultura
De izquierda a derecha es
mi vieja maldición, ahora que lo descubro:
.rahcucseeuqrenetayavysosubaedairotsihanuratnocayovet,
eramutehcnoconihcocetatneiS
Rima
Crujir de hojas secas,
suavizante para ropa vieja
Alcoba de ventanales
grandes, presidenciales.
Rima coqueta y obtusa;
brillo de la gamuza.
Alharaca
vieja, semi dios, engranajes de letras en par tuza.
Pregunto yo
Desolador paisaje, pena
dominante, amor consecuente;- pregunto yo: ¿Cuánto orgullo tiene tu mente?-
No es orgullo si no
decepción. Amargura y traición.
-Reformulo:
¿Cuánta mente tiene tu
orgullo?-
Escrito
Casta la virtud visita la
lectura
se hace don y muerte
prematura.
El escrito es acción
póstuma;
es la piedra al vuelo del
ave,
es la opinión para un
enclave.
Es la risa de un orgasmo,
es la luz para mi cuarto.
La ciudad
El cantar de los pájaros
ya no encanta a una mujer,
deben ser joyas y poder.
Sustento, realidad, algo
de comer.
Amor clasificado, amor
desfigurado
Dime
que oyes mujer
Elena
Luz prematura y ansiosa.
Virtud eres en detalle de
plena noche
Luciérnaga de bosque
Gota de luna, en tu
aletear zumban
los quejidos de un viejo
reproche.
Caminar
Un paso y la razón medio
paso
Medio paso la razón y paso y medio la pasión
Las pestañas y el ojo
El poder y su antojo
6 hienas para un león
4 yemas para una canción.
Tierra
y desolación.
Digestivo
Con cuchara ataco las
ideas.
La puntuación es
consecuencia
que solo dilata la tarea.
Llegar a digerir es la
real tarea;
para terminar cagando en
letras,
lo que fueron ideas.
Dinero
No
es que este cara la vida, más bien es tu cara defendiendo esta vida.
Aceitunas
Mis propios amigos; mi
familia, incluso yo mismo, en una gruesa fila de humanos por derribar. Del otro
lado la esperanza de cada uno de mis amigos, la de mi familia y la mía; como en
reflejo; como entre risas. Más allá lejos de nosotros todos; una calma.
Cordura
El pensamiento es el alma
de los muertos
el conocimiento la sangre
de infinitas batallas
el sentimiento la
intención, la memoria la razón,
el musculo el corazón.
Buen silencio
El silencio es insolencia astuta.
No lleva instrumento ni
crucifijo.
No sabe de libros.
Nadie lo escucha, nadie lo
imita,
el silencio es inocencia
hecho dinamita.
Al silencio nadie lo
agrede ni nadie lo calla.
El silencio sabe de
latidos, de respiración
el silencio ve estos
tiempos como humillación.
Esperanza
Detrás del telón la buena
intención,
mendigos de patrañas bajo
un candente sol.
La familia es la firma y
el mercado el confort.
La ciudad duerme la
memoria,
el semáforo y sus
historias.
En audífonos el grito
cautivo.
Por televisión abierta el
juicio y el castigo.
Amigos de la chispa del
encendedor,
el universo puede más que
un simple motor.
Pido que nos reunamos, que
acabemos con tanto dolor.
Mismo yo aquí
Soy preso de un te miento,
un loco de este cuento:
una marcha de arboles en
vez de tanto cemento.
Cargo humano pensamiento,
bondadoso ejercicio de un
oculto regimiento.
Cago letras para
desaciertos,
por tener un espacio entre
documentos;
entre personas más muestro
silencio,
en cada palabra un
arrepentimiento.
¿Dónde fue el antiguo
cuento?,
el de pocas palabras y
muchos gestos.
Por lo tanto: pura queja,
mucha palabra y poco acierto.
Un samurái en la sinagoga
(toma dos-relato)
Acción:
Se rebalsa la sangre de
los fieles.
Cae la sangre por la
espada del samurái.
El murmullo fuera de la
sinagoga es ilegible.
Dentro el silencio del
samurái.
El samurái es el pilar y
el filo de su espada es la decisión…
…¡corte!
Quinto poder
Es bueno estar armado,
apuntar el arma contra un objetivo, y no ser
el objetivo del arma.
Público
El ciudadano necesita del
artista,
El buen artista sabe de la
pregunta del ciudadano
El ciudadano aplaude el
hecho que sus emociones hayan sido tocadas.
Los aplausos son el
pasaporte; la impunidad que le permite al artista transitar sus conclusiones.
Las terminaciones de razón de los afectados
sensibles; hacen de la obra expuesta la real obra, la que el mismo artista
muchas veces nunca vio.
Voy
Ni encerronas ni esposas,
todo corre por cuenta
propia.
No soy tu paciente ni tú
siquiatra.
No cruzo arboles por
puentes,
llevo capucha y detrás mío
el presente.
Por el rio baja la suerte
hasta el mar
la sociedad se descarga de
un celular,
el pensamiento se cuadra
con paso regular,
la insolencia tiene un
plan,
toda fuga tiene un final .
Tres cuentos
Primera marcha
Un desconcierto de ciertos unidos por la coincidencia de
lienzos de masas y puños al viento. Así su alrededor era gente y más gente; ni
un solo conocido, nada que lo hiciera sentir ubicado dentro de algo. Perdido
marchó escuchando consignas como:” a ver a ver quien lleva la batuta los
estudiantes o el hijo e puta”.
En el intento por descubrir el motivo de la marcha reconoció
el argumento: las movidas del rector de la universidad de Valparaíso eran la
razón; así se pone al día. Entonces decide caminar entre la multitud pues
comprendía los motivos y le excitaba participar. Pocos instantes duro su participación,
ligerito llegaron los pacos con bombas lacrimógenas, palos y escudos a disolver
la marcha. El esperaba hacer justicia y
quizás poder ayudar a alguna muchacha en problemas o reducir algún carabinero; pero nada de esto
sucedió. Corrió hacia donde lo hizo la mayoría, atrás quedaba una batalla
campal en medio del humo. La resistencia de las consignas como el humo de las
lacrimógenas al viento se disolvía a causa de la fuerza propuesta por
carabineros en la batalla.
Subió al micro junto a otros estudiantes, donde iba también un
paco sentado.
En su casa supo que el rector de dicha universidad estaba
fuera del país en unas vacaciones.
Jugada
Entumido de frío, empapado de agua lluvia hasta la más
intima prenda; poseídas las rodillas, llenas de agua las plantillas. Las manos
frotaban desesperadas lo que fue un largo viaje en moto de Santiago a casa de
una chiquilla, previo consentimiento por internet.
Ella le propone: un té, secar su ropa y una manta cuadrille.
Mientras compartían marihuana y se enfriaba el té, la temperatura
sorpresivamente comenzaba a crecer con historias que parecían movidas de
ajedrez.
Con el rato le prepara un nuevo té, esta vez lo bebe caliente,
lo termina y pregunta entonces: ¿dónde fueron tus padres?”, -“a Quintero, a dos
horas de Santiago”-, (murmulla entre una sonrisa) -“llegan mañana”-. Entonces
el joven nota el rubor de sus mejillas y decide jugar el jaque mate.
Recuerdo
Enero 14, día lunes del año 2012. Despierta en
su casa de San Antonio con la emoción en el centro del estomago, esta lo
conduce a Ralco que está a unos 800 km de San Antonio. Un pueblo al este de los
ángeles; sector cordillerano. Sale de su casa con su mochila, $1500, un paquete
de fideos y uno de arroz. Ralco. Ahí conoció la gente que le dio la bendición
para subir la montaña, específicamente a la laguna de la montaña. La Mula.
Dos zancadas y el ánimo de su curiosidad y el
cariño por la naturaleza lo dejaron en la plaza de Ralco amarrando su mochila
en la parrilla del micro que lo dejaría en Vilcuncura. El último pueblo antes
de empezar la caminata de 30 kilómetros cerro arriba a la laguna La Mula.
Entonces, va haciéndose el camino cerro arriba.
Va hacia las araucarias (piensa al medio esta la laguna). Logra la cima del
cerro y avanza solo con intuición haciendo caminos. Llega a un sector donde hay
dos carpas y algunas personas, antes en el camino había visto un niño
acarreando dos bueyes, eran entonces para él las únicas personas entre medio de
los cerros.-- Es bueno contar que uno puede articular sus sueños, que la acción
es la llave de la puerta del sueño despierto--. Estuvo en la mula hasta
oscurecer; la laguna, las estrellas, el sonido del bosque de araucarias… Así lo
despertaron voces y recordó las carpas.
Se acercan entonces a él las carpas, avanza y va
apareciendo una muchacha que le hace sentir su respiración desde lo profundo de
su pecho. Aquella mirada fue amigable, en todos los pasos no pudo dejar de
disfrutar su mirar. Más cerca enrojeció un poco y vio a los demás, entonces
marcó postura y saludo a todos alegremente.
Miriam la mujer indicada y sus amigos (tres
hombres y una mujer) eran de Talcahuano. La otra carpa era de gente de Valparaíso
(2 mujeres y 3 hombres). Todas estas personas tenían de 20 a 26 años. Todos
habían subido lo mismo que él había subido, era entonces este su lenguaje.
Caída la noche alrededor de la fogata, Miriam
alegre lo invita a sentarse a su lado; frente a la fogata. Fogata donde sus
amigos contaban sus historias de scout. Él, de vez en cuando trataba de
responder o de preguntar, por participar. Pero en silencio sus intenciones eran
estar cerca de ella, y se mantuvo sentado al lado de la muchacha todo lo que
pudo. Después de poco rato, ya eran murmullos todas las risas y los aplausos de
los ajenos. Incluso a veces el sonido del bosque se callaba para permitir la comunicación de estos dos. Se lo habían
ganado: él la había encontrado a ella y ella a él. Así, esa noche supo de
ellos, de risas y ciencias hasta las cenizas de la fogata.
Apenas se asomo el Sol él salió de la carpa y
estiro su cuerpo con una alegría disimulada que nada envidiaba del amanecer
mismo; mientras todos dormían aún.
Avanzada la mañana flotaban en la laguna sus
historias mirando el cielo celeste y sintió la voz de Myriam que dijo: ¡voy por mi traje de baño y vuelvo al
agua! Solo vine a lavar esta loza; ¡ya vuelvo!-- Ella quería estar con él,
oírlo, sentirlo cerca, él mucho lo mismo. Ambos eran cautos--. Luego de
cocinarse al sol un momento les vino el sentir del hambre, y con ello la idea
de comer, y después subir la montaña que estaba a un lado de donde conversaban,
a la orilla de la laguna.
Él preparo más que rápido sus fideos con atún.
--De ahí que se yo--, se hacía el interesante por ahí, ordenando de más su
lugar, cortaba leña, cualquier cosa, --recuerdo que le picaban los pies por ir
donde estaba ella para que subieran la montaña--. Él, la naturaleza y la mujer
fueron el milagro de aquella tarde de compartir historias y desafíos.
Él la quería besar y abrazar, y ella quería lo mismo, pero él entendía que había para esto un momento
guardado.
Llegada la noche dos hombres que habían
instalado en la tarde su carpa lejos de las nuestras, se acercaron con el fin
de conversar y compartir una botella de pisco a la mitad más o menos. Cosa a la
que le animamos algunos, incluyendo a Miriam y a él. Los vasos eran los tarros
de las conservas, él compartió su vaso con Miriam. Duro el pisco lo que duraron
los misterios de los relámpagos de aquella noche, lo que duro la preocupación
de mantener la llama de la fogata; y hablamos de subir todo el grupo la montaña
más alta para el amanecer. Miriam le hablaba a él de ir a la laguna y sus ganas eran de lo mismo… y sonaba y
sonaba en la noche de pisco y fogata: ¡échenle leña al fuego!, ¡échenle leña al
fuego!-- Para ellos todo iba en una dirección--. Dejaron de sonar las voces.
Miriam le susurro un poco fuerte: ¡vamos a la laguna!; él tenía su saco ya en
la mano y la iba siguiendo sin prender ni una luz; a la noche los dos. Se
sentaron en las rocas sobre la laguna, la abrazo y cubrió con su capa saco de
dormir, balbució unas palabras, y la beso. Aceitunas, mermeladas, cerezas,
guindas sandias, melones, manzanas… ¡fresquitos! los labios de esa mujer, su
cuerpo suave cumplía su deseo. Aquella noche las estrellas los vieron. Las
estrellas y el bosque los vieron en el reflejo de la laguna. Aquella noche
fría, ella con su sudor apago el ardor del alma suya… No sabía él que esa noche
tendría que amanecer, que nunca volvería, que es difícil entender.
Como siempre se levanta el sol; esta vez todos
nos levantamos, diez u once personas en total, todos a la montaña más alta del
lugar, él y Miriam extrañamente distanciados, algo que él no esperaba estaba
pasando.
Entonces mientras el grupo subía la montaña, él
un poco apartado pensaba: ¿es tan corto el amor?, ¿Volverá a mirarme como me
miraba?, ¿Volveré a tenerla en mis brazos como ella lo deseaba?; ¿Es tan corto
el amor? Pocas fueron las miradas que cruzaron y varias las interpretaciones
que él les dio a esas miradas. ¿Dónde estaban los aciertos que ella me dio? –se
lastimaba--. En la cima la nieve que deshiela le decía que ese es el curso, que
a veces cuesta entender. Conversaron algunas cosas arriba en la montaña, cosas
inciertas claro. Él, tozudo continuaba ¿Dónde estaba su mirada?, no se hacía
agua su nieve, su nieve seguía siendo nieve a los rayos del sol. Terco bebía el
agua de la nieve que era riachuelo y que descendía la montaña junto con él
separado del grupo al atardecer. Esa noche se sintió solo en aquel lugar, no
estaban con él las estrellas, ni el bosque, ni la laguna.
Despertó el día siguiente, todos se iban, Miriam se iba.
Ella paso por su lado y le susurro un poco fuerte que la acompañara,
desconcertado él la siguió…
.. --Veo fielmente el lugar, su beso y su mirada de
despedida, beso y mirada que firmaron sus nombres en este mi recuerdo--.